El día que desperté

No se puede enseñar nada a un hombre, sólo se le puede ayudar a descubrirlo en su interior.
Galileo Galilei

UNA NUEVA FORMA DE VIDA:” EL ARTE DE VIVIR UNA FELICIDAD QUE NO ES EFIMERA”.

Así me siento, en PAZ; un estado inalterable de calma y felicidad interior, que me está permitiendo ver con claridad y descubrir muchas cosas que tenía delante y era incapaz de apreciar.

Estoy empezando a liberar mi mente,…a ver placidamente entre el ruido y la prisa. He dejado de buscar en el lugar equivocado, porque ahora sé que todas las respuestas están dentro de mí.

“En cuanto te conozcas y confíes en ti mismo, sabrás cómo vivir.”
Goethe

El verdadero poder reside en el dominio de la mente, del pensamiento, de la forma en la que percibimos e interpretamos lo que nos rodea…. La lente con la que ahora veo el mundo ha cambiado. Mi felicidad ya no depende de circunstancias o hechos externos, ni de lo que mis pensamientos me dicen, ni de lo que nos han enseñado a creer que son las cosas. He conseguido elevarme a un estado de conciencia y plenitud interior, que me permite reconocer a cada paso lo importante, disfrutar, y sentir cada cosa que va aconteciendo en mi camino independientemente de cual sea el final del viaje.

La vida acontece en el PRESENTE, y es mucho para dejar que se convierta en algo insignificante. Ya no existen instantes vacíos para mí, porque he educado a mi mente para apreciar la autenticidad y caducidad de cada momento, para centrar todo mi ser en el placer de experimentar todas las sensaciones que puede aportarme cada experiencia de vida.

Creo que todo este tiempo he estado dormida, que me he limitado a llenar mi vida de ocupaciones y actividades, sin evaluar realmente a quien pertenecían esos deseos. Simplemente he avanzado sin pensar.
Y es ahora, ante la imperiosa necesidad de encontrar sentido, cuando me he detenido para observar con serenidad que no me sentía en paz con mi alma dentro de la ruidosa confusión de la vida.

Me he dado cuenta de que tengo bloqueadas muchas partes de mi misma por el miedo, la inseguridad, la exigencia, las falsas expectativas, y que todo este tiempo he ido avanzando, con la esperanza de obtener algún día la recompensa y sin ser consciente de la carga y sufrimiento con el que he llenado hasta ahora mí presente. Creo que he saboreado muy pocas cosas, y que me he perdido muchas otras,…Estas ataduras mentales me han impedido ver lo verdaderamente importante y me han hecho ser esclava de un pensamiento que ha estado girando todo este tiempo en torno a la infelicidad.

Por eso, he decidido dejar que mí espíritu se exprese libremente; me he abierto hacia una vida basada en la intuición, la improvisación, la creatividad, y la magia del momento y las sensaciones. Respirar con calma, vivir sin prisa, y abrazar con simpatía cada cosa que ocurra en mi camino y que realmente me apetezca experimentar, se ha convertido en mi gran prioridad.

“Estoy en la catarsis del conocimiento a la SABIDURÍA”.
No basta con conocer y tener delante grandes verdades. La sabiduría consiste en asimilar, interiorizar, y llevar a la práctica ese conocimiento en potencia. Los resultados se producen al actuar bajo la luz de esas grandes verdades que se van desvelando durante la vida, y que en muchas ocasiones no estamos preparados para ver.

La virtud reside en hacerlo; en convertirlo en una forma de vida.



¿Qué pasará A PARTIR DE AHORA?
No lo sé. Tampoco me perturba no saberlo. La vida es un gran misterio que tiene la habilidad de sorprenderte, si te permites “creer” que todo es posible.

Estoy tranquila, porque TENGO y PRACTICO lo más importante para mí:

Ser feliz todos los días, disfrutar sin limitaciones de todo lo que me rodea, y vivir una ‘vida ancha’ llena de experiencias, sin olvidar la más alta de las vocaciones:

La reflexión constante y el esfuerzo por mejorarme a mí misma.
Adaptación de Sócrates

Ya no me preocupa el futuro porque he aprendido que todo se sitúa en el presente, y que ser feliz es una cuestión de ‘HOY Y AHORA’; que ser feliz es una cuestión de SER, no de tener. Es…

…”Es sentir a cada instante la libertad, la plenitud, y la fuerza interior que te permite experimentar en toda situación el placer de estar vivo”.
SI TENGO ESO, LO HABRÉ TENIDO TODO.

Tres verdades que me enseño un gran maestro y que me acompañarán durante toda mi vida:

- “Ve plácidamente entre el ruido y la prisa”.
- “Fortalece tu espíritu”.
- “Lucha por ser feliz”.


A todos los que leáis esta carta, os deseo una vida plena. Que luchéis por lo verdaderamente importante, y que no os dejéis arrastrar por la confusión y la prisa de este mundo, porque la verdadera esencia, la magia de la vida se oculta detrás de todo eso.